Si quieres cambiar el mundo, empieza por hacer tu cama

Nota: Entrada del 21.06.2014 recuperada de mi antiguo blog

Una costumbre muy arraigada en los Estados Unidos es la de los "commencement address", discursos que se dan a los alumnos que obtienen su graduación, tanto en la universidad (college) como en un instituto (high school). Para pronunciar dichos discursos, la institución educativa invita a un personaje notable por sus logros, ya sean del mundo de la política, los negocios, la eduación, la ciencia, las artes o, como en este caso, el mundo militar. Todos los años se pronuncian cientos de "commencement address", algunos de ellos memorables, destinados a inspirar e iluminar el futuro de los recién graduados mediante el ejemplo vital de la personalidad invitada. De todos los que he podido escuchar este año, sin duda me quedo con que pronunció el Almirante William McRaven el pasado mes de mayo durante la ceremonia de graduación de la Universidad de Texas en Austin.  

Mc Raven es el actual Comandante del Mando de Operaciones Especiales de los Estados Unidos (USSOCOM), y dirigió la operación "Neptune Spear", que condujo a la localización y muerte de Osama bin Laden. En su discurso, compartió con los alumnos las lecciones vitales extraidas de su experiencia como Navy Seal, una de las unidades de operaciones especiales más exigentes del mundo. Se trata de una intervención directa, sucinta (apenas 20 minutos), clara y muy emocionante sobre la capacidad que todos tenemos para cambiar el mundo. Para el Almirante Mc Raven, todo empieza por un acto tan simple como hacer tu propia cama, tarea que cada amanecer, sin excusa, debía realizar a la perfeccióndurante su entrenamiento como "Seal":

"Si haces tu cama cada mañana, habrás completado la primera tarea del día. Te proporcionará una pequeña sensación de orgullo y te animará a realizar otra tarea y otra y otra. Al final de la jornada, una tarea finalizada se habrá convertido en muchas otras tareas finalizadas. Hacer tu cama refuerza también el convencimiento de que, en la vida, las pequeñas cosas importan. Si no puedes hacer bien las cosas pequeñas, nunca harás bien las grandes. Y si por casualidad has tenido un día horrible, regresarás a casa y te acostarás en una cama bien hecha (que tú has hecho), y esa cama te está diciendo que mañana todo irá mejor. Si quieres cambiar el mundo, empieza por hacer tu cama".

Esta fantástica reflexión constituye el primer punto de un decálogo que podemos resumir así:

1. Si quieres cambiar el mundo, empieza por hacer tu cama. Haz bien las cosas pequeñas para poder hacer bien las grandes.

2.No puedes cambiar el mundo tú solo. Si quieres cambiar el mundo, busca gente que lo haga contigo.

3. Si quieres cambiar el mundo, mide a las personas por el tamaño de su corazón.

4. Si quieres cambiar el mundo, recupérate de los fracasos y sigue adelante.

5. Si quieres cambiar el mundo, no tengas miedo de las situaciones más comprometidas, difíciles ni avergonzantes. La vida está llena de ellas.

6. Si quieres cambiar el mundo, a veces tienes que arriesgarte y ponerte en cabeza.

7. Si quieres cambiar el mundo, nunca retrocedas ante los tiburones que quieran avasallarte.

8. Si quieres cambiar el mundo, debes ofrecer lo mejor de ti mismo en los momentos más oscuros.

9. Si quieres cambiar el mundo, empieza a cantar cuando estés cubierto de barro hasta el cuello. Nunca subestimes el poder de la esperanza. 

10. Si quieres cambiar el mundo, nunca, jamás, te rindas.

Una magnífica lección vital ¿no les parece?