La esclavitud de los pequeños gastos
Un refrán anglosajón dice:
En el mismo sentido, otro muy conocido dicho afirma que “el diablo está en los detalles”. En el caso de nuestro gasto personales, tales detalles se esconden en forma de modestas partidas discrecionales a las que no prestamos atención.
Mi nuevo post en Domestica Tu Economía reflexiona sobre este tema y propone un sencillo método para detectar y cuantificar esos pequeños gastos que pueden acabar tiranizándonos inadvertidamente: